La Red de Cambio pone a las personas en el centro de su labor, reconociendo que el cambio real comienza con individuos empoderados y comprometidos. Este eje se enfoca en capacitar a las personas, proporcionando herramientas y conocimientos necesarios para que puedan ser agentes de cambio en sus comunidades. Se promueve la participación activa, el liderazgo y la responsabilidad cívica, fomentando una ciudadanía informada y proactiva que pueda contribuir de manera significativa al desarrollo social y económico.
El fortalecimiento institucional es crucial para la sostenibilidad del cambio. La Red de Cambio trabaja con organizaciones no gubernamentales, empresas, y otras entidades, ayudándolas a mejorar su capacidad de gestión, transparencia y efectividad. Este eje busca crear un entorno institucional robusto que pueda implementar y sostener iniciativas innovadoras. Al promover alianzas estratégicas y el intercambio de buenas prácticas, se asegura que las instituciones sean motores de desarrollo y actores clave en la solución de problemas sociales y económicos.
La Red de Cambio se dedica a preparar a individuos para que puedan asumir cargos públicos en el futuro, reconociendo la importancia de un liderazgo competente y comprometido en la gestión pública. Este eje se enfoca en la formación de futuros líderes políticos, brindándoles la educación, habilidades y valores necesarios para ejercer con integridad y eficacia. A través de programas de capacitación, mentorías y experiencias prácticas, se busca desarrollar una nueva generación de funcionarios públicos que estén preparados para enfrentar los desafíos de gobernanza y trabajar por el bienestar común. La Red de Cambio promueve así una cultura de servicio público orientada a la transparencia, la rendición de cuentas y la participación ciudadana.